El Principito es el libro más hermoso que he leído en mi vida, es una fuente de enseñanza sobre los seres humanos, y para ellos, nos habla de una forma simple y sencilla, que sólo podrás entender si tenés la cabeza abierta.
En él le tiende una mano al niño que todos fuimos alguna vez, y que sólo algunos tenemos claro que sigue allí y nunca se fue.
El Principito salió de su Asteroide B 612 en busca de aventura, pero también para no sentirse tan sólo; y en cada planeta se encontró con un alma humana. No se levantó del pupitre, sino que aprendió la lección y se la recitó al mundo.
El libro es un catálogo de moralejas. Pero en su credo no hay castigos, purgas, prohibiciones ni negaciones. Sus mandamientos hablan 180 lenguas diferentes, los siguen niños y adultos, no creyentes y hombres de fe. Imperecedero, se puede leer ayer, hoy y mañana.
Después de leerlo hasta casi saberlo de memoria se me ocurrió hacer el listado de mandamientos:
1.-
He aquí mi secreto, que no puede ser más simple : sólo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos. Es su primer mandamiento. Lo valioso no se mide ni se toca. Tampoco se compra con dinero. Una muy buena lección en un mundo donde parece ser que lo importante es lo que tenés y no lo que sos, en momentos que la avaricia ha sepultado los principios importantes.
2.-"
Las personas mayores no son capaces de comprender las cosas por sí mismas. Es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones", dice en el libro, es muy difícil tratar de que todos puedan entender lo simple sin darle vueltas.
3.- Cree que
"uno es para siempre responsable de lo que domestica", cuando queres a alguien ya creás un lazo indisoluble, el valor de la amistad, de la responsabilidad y del compromiso.
"Yo no te necesito, tú tampoco tienes necesidad de mí, pero si me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Tú serás para mí único en el mundo, yo seré para ti único en el mundo", le dijo a su amigo el zorro.
4.- Es importante conocer las propias limitaciones y que
"se le debe pedir a cada uno lo que está a su alcance realizar". En su decálogo de enseñanzas también anima a hacer ejercicio de autocrítica.
"Es mucho más difícil juzgarse a sí mismo que juzgar a los otros. Si consigues juzgarte rectamente es que eres un sabio".
5.- Hablando de su flor, la rosa que abandonó en su planeta antes de partir, el Principito señalaba
: "Debí haberla juzgado por sus actos y no por sus palabras, me perfumaba y me iluminaba, ni debí haber huido jamás". Debí haber adivinado su ternura, detrás de sus pobres astucias. ¡Las flores son tan contradictorias! Pero yo era demasiado joven para saber amarla". En su sexto mandamiento al final el principito reconoce el valor de la experiencia.
6.- Además de valorar la amistad y la complicidad, también tiene su interpretación relativa.
"Amor no es mirarse el uno al otro , sino mirar los dos en la misma dirección", dice. En la era del celular, en el que muchas parejas se miran y no se ven, el Principito apuesta por remar en la misma dirección, hablar y comunicar.
7.- En su periplo ya percibió el olor a podrido de las finanzas.
"Conozco un planeta en el que vive un señor muy colorado. Nunca ha olido una flor. Nunca ha contemplado una estrella. Nunca ha amado a nadie. Nunca ha hecho otra cosa que sumas. Se pasa el día diciendo: 'Soy un hombre serio, soy un hombre serio', lo que le hace hincharse de orgullo. ¡Pero eso no es un hombre, es un hongo!"
8.- Un mandamiento enlaza con el otro y le molesta que se valore a la gente por lo que tiene y no por lo que es. Dice que "
a los mayores les gustan las cifras. Cuando se les habla de un nuevo amigo jamás preguntan lo esencial del mismo. Nunca preguntan: '¿Qué tono tiene su voz? ¿Qué juegos prefiere? ¿Le gusta coleccionar mariposas? Pero en cambio preguntan ¿Qué edad tiene? ¿Cuanto pesa? ¿Cuanto gana su padre? Solamente con esos detalles creen conocerte'.
9.- En su encuentro con el hombre de negocios, el Principito le pregunta al avaro qué hace con todas las estrellas que posee. -
"Nada, solo las poseo", le responde el financiero. - "Y ¿para qué te sirve poseer las estrellas?", le dice el héroe ficticio. - "Me sirve para ser mas rico". Para comprar más estrellas si alguien las encuentra". - Pero "¿Cómo se pueden poseer las estrellas?".
10.-Todas nuestras acciones tienen consecuencias.
"Nada en el universo sigue siendo igual si en alguna parte, no se sabe dónde, un cordero que no conocemos ha comido, o no, a una rosa...". Todo lo que sucede al otro lado del mundo, de una u otra manera, nos acaba afectando.
y siguen las enseñanzas...
Pido perdón a los niños por haber dedicado este libro a una persona mayor. Tengo un motivo importante para ello: esta persona mayor es el mejor amigo que tengo en el mundo. Tengo otro motivo, además: esta persona mayor puede entenderlo todo, hasta los libros para niños. Tengo aún un tercer motivo: esta persona mayor vive en Francia, donde padece hambre y frío. Tiene mucha necesidad de ser consolado. Si todos estos motivos no son suficientes, quiero, entonces, dedicar este libro al niño que una vez fue esa persona mayor. Todas las personas mayores han sido primero niños. (Pero pocos lo recuerdan)."
Fuente: Dedicatoria
"Las personas mayores nunca son capaces de comprender las cosas por sí mismas, y es muy aburrido para los niños tener que darles una y otra vez explicaciones."
Fuente: Capítulo I
"Cuando el misterio es demasiado impresionante, es imposible desobedecer."
Fuente: Capítulo II
"Caminando en línea recta no puede uno llegar muy lejos."
Fuente: Capítulo III
"Pero nosotros, que comprendemos la vida, nos burlamos de los números."
Fuente: Capítulo IV
"A los mayores les gustan las cifras. Cuando se les habla de un nuevo amigo, jamás preguntan sobre lo esencial del mismo. Nunca se les ocurre preguntar: '¿Qué tono tiene su voz? ¿Qué juegos prefiere? ¿Le gusta coleccionar mariposas?' Pero en cambio preguntan: '¿Qué edad tiene? ¿Cuántos hermanos? ¿Cuánto pesa? ¿Cuánto gana su padre?' Solamente con estos detalles creen conocerle."
Fuente: Capítulo IV.
"Es una cuestión de disciplina, —me decía más tarde el Principito—. Cuando por la mañana uno termina de arreglarse, hay que hacer cuidadosamente la limpieza del planeta."
Fuente: Capítulo V
"Conozco un planeta en el que vive un señor muy colorado. Nunca ha olido una flor. Nunca ha contemplado una estrella. Nunca ha amado a nadie. Nunca ha hecho otra cosa que sumas. Se pasa el día diciendo, como tú: "¡Soy un hombre serio! ¡Soy un hombre serio!", lo que le hace hincharse de orgullo. Pero eso no es un hombre, ¡es un hongo!."
"Es tan misterioso el país de las lágrimas..."
Fuente: Capítulo VII
"No se debe nunca escuchar a las flores. Solo se las debe contemplar y oler. La mía perfumaba mi planeta, pero yo no era capaz de alegrarme de ello."
Fuente: Capítulo VIII
"Si yo ordenara —solía decir—, si yo ordenara a un general que se transformara en ave acuática y el general no me obedeciera, no tendría él la culpa. La tendría yo."
Fuente: Capítulo X
"Se debe pedir a cada cual, lo que está a su alcance realizar."
Fuente: Capítulo X
"He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: solo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible a los ojos."
Fuente: Capítulo XXI
"Es verdaderamente útil porque es linda."
Fuente: Capítulo XXI
"Pero si tú me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Para mí, tú serás único en el mundo. Para ti, yo seré único en el mundo..."
Fuente: Capítulo XXI
"Bebo para olvidar que soy un borracho."
"Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante."
"Lo hermoso del desierto es que en cualquier parte esconde un pozo."
"Los hombres ocupan muy poco lugar sobre la Tierra... Las personas mayores no les creerán, seguramente, pues siempre se imaginan que ocupan mucho sitio."
"No era más que un zorro semejante a cien mil otros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo."
"Para los vanidosos todos los demás hombres son admiradores."
"Si alguien ama a una flor de la que sólo existe más que un ejemplar entre los millones y millones de estrellas, es bastante para que sea feliz cuando mira a las estrellas."
"Sólo se conocen bien las cosas que se domestican."
"Tú no eres para mí todavía más que un muchachito igual a otros cien mil muchachitos. Y no te necesito. Tampoco tú tienes necesidad de mí. No soy para ti más que un zorro entre otros cien mil zorros semejantes. Pero si me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Tú serás para mí único en el mundo, yo seré para ti único en el mundo..."
"Y cuando te hayas consolado (uno siempre termina por consolarse) te alegrarás de haberme conocido."
"¿Y de qué te sirve poseer las estrellas?
-Me sirve para ser rico.
-¿Y de qué te sirve ser rico?
-Me sirve para comprar más estrellas."
"Me creía rico con una flor única y resulta que no tengo más que una rosa ordinaria."
Diálogo entre el Principito y el zorro
"Me pregunto si las estrellas se iluminan con el fin de que algún día, cada uno pueda encontrar la suya."
"Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde; desde las tres yo empezaría a ser dichoso."
"Únicamente los niños saben lo que buscan. Pierden el tiempo con una muñeca de trapo que viene a ser lo más importante para ellos y si se la quitan, lloran..."
"—Te juzgarás a ti mismo"
"Uno se expone a llorar un poco, si se ha dejado domesticar..."
Fuente: Capítulo XXV